¿Qué es el Liderazgo?

Liderazgo, una palabra que es sinónimo de gran responsabilidad, toma de decisiones y autoridad sobre otras personas pero realmente te has preguntado cuál es su verdadero significado y sobre todo, ¿cuál es su impacto?

A continuación presentamos una definición del liderazgo acompañada de la caracterización de algunos de sus estilos junto a la reseña de su evolución, porque el liderazgo no es uno solo, son varias aptitudes y actitudes que se conjugan para crear el mejor ambiente posible dentro de un entorno y que indudablemente ha variado con el transcurso del tiempo.

¿Qué es el liderazgo?

El liderazgo se define como todas aquellas competencias y aptitudes que crean influencia en otras personas.

Por ello y para ejercer el rol de líder, la persona debe desarrollar un conjunto de características y criterios que le permitan tomar decisiones con enfoque en cuanto a la administración tanto de las personas en su grupo como de los recursos disponibles y los objetivos propuestos. Asimismo el líder se distingue por la confianza e inspiración como factor motivante, la integridad y la innovación, esa cualidad capaz de romper paradigmas y hacer distintivos al grupo y en consecuencia a la organización.

Estilos de liderazgo

Si bien el liderazgo está plenamente definido en cuanto a su objetivo como fuerza influyente sobre otros, este se puede catalogar dentro de diez estilos principales que comprenden:

– Liderazgo autocrático: es aquel en la que el líder posee un poder pleno sobre el equipo.

– Liderazgo liberal: donde el líder da libertad plena a los miembros del grupo para trabajar por cuenta propia.

– Liderazgo carismático: es cuando el líder, con cualidades influyentes inspira admiración dentro del equipo, incidiendo en su postura e impulsando así su capacidad de trabajo.

– Liderazgo democrático: se da cuando el líder, aun responsable de las decisiones finales y directrices a considerar, toma en cuenta los aportes y sugerencias de los miembros del grupo de trabajo.

– Liderazgo burocrático: es aquel que ejerce su posición de liderazgo en total acatamiento de las normas establecidas para tal fin y que además emplaza al grupo bajo su responsabilidad al trabajo en total apego estricto a sus directrices.

– Liderazgo proactivo: se presenta cuando el líder desde su posición busca incentivar la colaboración y participación grupal simultáneamente con el objeto de desarrollar a plenitud las competencias de sus miembros.

– Liderazgo transaccional: resulta a partir del reconocimiento pleno del líder por parte del equipo, este estilo se caracteriza por establecer una relación donde a partir de la eficiencia se premia o castiga a los integrantes del grupo.

– Liderazgo natural: generado cuando un miembro del equipo, bajo implícito reconocimiento, ya sea por su experiencia, capacidades o por carisma, asume el liderazgo bajo la aceptación plena del grupo, creando un ambiente armonioso y donde además los miembros del equipo se integran en la propuesta para la toma de decisiones que afrontará el líder.

– Liderazgo orientado al trabajo: bajo este liderazgo, se impone el criterio de priorizar exclusivamente la consecución de resultados óptimos. Si bien se basa en una planificación eficiente, no considera las observaciones del equipo, dando por hecho su capacidad real y competencia para llevar a cabo las funciones encomendadas.

– Liderazgo transformacional: este estilo de liderazgo pretende motivar a sus integrantes y que estos sepan afrontar cambios de forma continua, dentro de los parámetros de viabilidad, a fin de adecuarse a las necesidades de la organización. Si bien presenta muchas similitudes con el estilo carismático, el liderazgo transformacional es un proceso constante y a largo plazo dentro de la organización, previendo el crecimiento dentro de la estructura de los miembros del equipo, con nuevas tareas y mayores responsabilidades.

Cabe mencionar que el liderazgo no es simplemente una fórmula a implementar para obtener control, es una cualidad que debe adecuarse a la naturaleza y los propósitos establecidos por las organizaciones, donde el líder al igual que el resto del grupo debe estar abierto y dispuesto al aprendizaje continuo a fin de moldear y adaptar sus capacidades al reto que supone ser la cabeza visible dentro de un entorno.

Evolución del liderazgo

Desde una óptica organizacional respecto a la visión del liderazgo conforme con el paso de los años, todo parte de la idea originaria de vislumbrar al liderazgo dentro de las organizaciones bajo una premisa de obediencia absoluta al líder, un estereotipo actualmente rezagado pero característico durante el siglo XX y hasta los años 70s cuando empezaron a surgir planteamientos y teorías que presentaban al liderazgo como parte de una relación sensata entre dirección e integración grupal.

A partir de allí ciertamente se empezó a plantear una concepción integral del liderazgo como parte de la cultura de las organizaciones y su orientación a la eficiencia y progresivamente a la independencia de acción por parte de los subalternos del líder en algunos casos, donde fuese posible y de probado impacto positivo en el desempeño de estos.

Al respecto, hay quienes consideran que esto formó parte en cierta forma de la adopción de los modelos de gestión propios de oriente y cuya implementación en occidente se dio a partir de la segunda mitad del siglo XX, impactando en el ámbito del liderazgo a partir de los años 80s y donde además cabe destacar aparte de esto la marcada influencia de la tecnología en los procesos productivos, impulsada cada vez más con la llegada del nuevo milenio.

Consecuentemente, las relaciones dentro de las organizaciones evolucionaron a partir de su reestructuración, derivadas del planteamiento de conceptos innovadores que presentasen una nueva perspectiva en la dinámica organizacional haciéndola más interactiva, creando y fomentando canales de comunicación y retroalimentación.

Si bien el liderazgo está estrechamente relacionado a una posición jerárquica dentro del organigrama, su visión en la actualidad es la de percibir al líder como un agente que integra y articula la relación y la dinámica del grupo de trabajo a su cargo, buscando maximizar los resultados así como las capacidades y competencias propias de sus miembros.

Ciertamente la evolución del liderazgo es constante en estos tiempos de marcado dinamismo por lo que lo hoy considerado inconcebible, mañana puede ser una tendencia. El liderazgo al final se basa en encaminar y compenetrar, pensar en las organizaciones como seres funcionales y no netamente autómatas, eso es lo que sin duda las hará destacarse del resto, ser competitivas y tener un ambiente al cual muchos querrán pertenecer.

Para aprender más sobre Liderazgo puedes visitar este video de YouTube o este blog que trata el tema a fondo.

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