A lo largo de los años, la literatura ecuatoriana se ha caracterizado por tratar temas nacionales. Se le ha dado la denominación de costumbrista y ha tenido gran repercusión en el ámbito político del país. Quizás, esta sea la razón por la que hasta el siglo XXI no tuvo una significativa proyección internacional.
Como toda la literatura latinoamericana, la ecuatoriana también tiene precedentes en la tradición oral precolombina. Destacó el poema Elegía a la muerte de Atahualpa, el cual cuenta el dolor del pueblo al perder a su soberano. Se le ha adjudicado al cacique Jacinto Collahuaso de Alangasí.
En la etapa colonial se hace una división de dos etapas: el neoclasicismo y el barroco. En cuanto a la primera etapa, el neoclasicismo no se desarrolló como tal, pero tuvo un exponente destacado: Eugenio de Santa Cruz y Espejo. Un escritor controversial que fue enviado a la cárcel dos veces por sus fuertes críticas a la sociedad capitalina del momento.
La literatura ecuatoriana del barroco fue predominante durante la colonia. Estuvo fuertemente influenciada por las corrientes literarias españolas. La crítica consideró los textos de ese período como de baja calidad y de temas religiosos. Uno de los autores destacados de ese momento fue Juan Bautista Aguirre.
El Romanticismo llegó al Ecuador en el s. XIX, aunque sin compartir todas las características del movimiento europeo. Se caracterizó por los elementos costumbristas y la exaltación del paisaje. Entre sus representantes se encuentran Dolores Veintimilla de Galindo y Juan Montalvo. A principios del s. XX se inició el Modernismo ecuatoriano.
Curiosamente, este período tuvo cuatro representantes poetas, que sobresalieron por el pesimismo y la melancolía en los versos. Se les llamó “los decapitados”, pues los cuatro se suicidaron. Se trata de Medardo Ángel Silva, Ernesto Noboa y Caamaño, Arturo Borja y Humberto Fierro.
En cuanto a las vanguardias, no se puede decir que Ecuador fue participante, quizás debido a los conflictos políticos y sociales que atravesó en esa etapa. Sin embargo, a mediados del s. XX se desarrolló la corriente realista que marcó grandes cambios en los temas, estilos e ideologías. Destacaron Luis A. Martínez y Jorge Icaza.
La ruptura con el refinamiento literario y la revolución de las formas llegó de forma tardía, después de los años 60. Hoy por hoy la literatura ecuatoriana está representada por narradores y poetas que han trascendido la barrera nacional, logrando una proyección internacional jamás vista.
Escritores Actuales
La literatura contemporánea de Ecuador ha estado gratamente protagonizada por mujeres, aunque esto no elimina a grandes plumas masculinas de hoy. Pero, sin duda, ha habido un interesante fenómeno que ha puesto en la palestra tanto a narradoras, como a poetas que exploran temas desde una perspectiva actual y femenina.
La violencia, el poder y las dinámicas familiares son algunas de las temáticas que predominan la escena. Si hay algo que ha diferenciado esta producción literaria de la de siglos anteriores ha sido la proyección internacional que ha alcanzado. Varios galardones han sido otorgados en otras latitudes a estos escritores actuales.
Entre los nombres que protagonizan el panorama actual se encuentran Mónica Ojeda, Raúl Vallejo, Gabriela Alemás, María Fernanda Ampuero, Miguel Antonio Chávez, Solange Rodríguez Pappe, entre otros. Todos con reconocimiento de medios nacionales y extranjeros, trayendo una nueva visión del mundo y la literatura en el país.
1) Miguel Antonio Chávez
1979
Miguel Antonio Chávez (Guayaquil, 1979) es un escritor y gestor cultural ecuatoriano, reconocido en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (2011) como uno de los “25 secretos literarios de América Latina”. Ha sido co-antologador de tres selecciones de cuentos de autores peruanos y ecuatorianos.
Durante su juventud ha sido parte de la agrupación cultural “Buseta de Papel” de su ciudad natal, Guayaquil. Participó como jurado (2012) en el Premio Alba de Novela y ha colaborado en diferentes revistas del continente: Letralia de Venezuela, Letras S5 de Chile y Hermano Cerdo de México. También ha sido incluido en diversas antologías de cuentos.
Es Comunicador Social con especialidad en Redacción Creativa e hizo estudios de Diplomacia y Relaciones Internacionales de la Universidad de Guayaquil. Trabajó en agencias publicitarias y se ha dedicado a la gestión cultural desde el año 2004. Ha publicado dos novelas, un libro de cuentos y una obra de teatro.
Entre sus obras más destacadas se encuentran:
- Yo, Beato
- Conejo ciego en Surinam
2) Solange Rodríguez Pappe
1976
Solange Rodríguez Pappe (Guayaquil, 1976) es una escritora y profesora de educación superior ecuatoriana. En 2017, sus 20 años de trayectoria literaria y docente fueron reconocidos con el Premio Matilde Hidalgo con presencia del presidente de la república. Se especializa en el género narrativo del cuento breve.
En 2010 ganó el Premio Joaquín Gallegos Lara al mejor libro del año. Es una de las principales representantes de la literatura actual de lo fantástico y lo extraño en Ecuador, junto con María Fernanda Ampuero y Mónica Ojeda. Hizo un trabajo de investigación sobre el fin del mundo en Latinoamérica que la ha hecho destacar en la academia.
Ha publicado siete libros de cuentos, algunos de ellos han sido traducidos al mandarín, inglés y francés. Solange Rodríguez Poppe forma parte de una generación de mujeres ecuatorianas que han profundizado lo fantástico y lo han llevado a la esfera internacional. Su influencia literaria proviene de las autoras del mismo género en Europa y Latinoamérica.
Entre sus obras más destacadas se encuentran:
- La primera vez que vi un fantasma
- Balas perdidas
3) Mónica Ojeda
1988
Mónica Ojeda (Guayaquil, 1988) es una de las escritoras más relevantes de la literatura contemporánea de Ecuador y Latinoamérica. El diario El País la categorizó como representante del “nuevo boom latinoamericano”. En 2017, apareció en la lista Bogotá 39 como una de las mejores escritoras latinoamericanas menores de cuarenta años.
La crítica la ha elogiado varias veces, tildándola de muy talentosa y con extraordinarias habilidades para usar diferentes recursos del arte contemporáneo en su obra. Ha publicado libros de poemas, cuentos y novelas, explorando temáticas de horror, como el caso de la relación que hace de lo femenino y lo monstruoso.
Se ha caracterizado por ser polémica, al también temas tabúes como el incesto y el despertar sexual en la adolescencia. Ha ganado el Premio Alba Narrativa (2014) y el Premio Príncipe Claus Next Generation (2019). Junto con otras escritoras como Solange Rodríguez Poppe y María Fernanda Ampuero forma parte de una generación destacada de autoras.
Entre sus obras más destacadas se encuentran:
- Mandíbula
- Las voladoras
- Nefando
Escritores Famosos
La literatura ecuatoriana estuvo representada a lo largo de su historia por grandes escritores. Aunque durante varios siglos la proyección literaria no fue una realidad, eso no le quitó su aporte al país y el continente. Desde el romanticismo hasta el realismo, la producción literaria de los escritores famosos compartió el carácter costumbrista.
Siempre abordando temas nacionales y con un trabajo arduo por expresar una estética propia, los mejores autores del país construyeron bases sólidas en la poesía, especialmente. De igual forma, la literatura ecuatoriana estuvo atravesada por los conflictos bélicos, políticos y sociales que, incluso, interrumpieron la producción durante un tiempo.
Grandes figuras como Medardo Ángel Silva, Jorge Carrera Andrade, Juan Montalvo, Jorge Icaza, Eliécer Cárdenas destacaron por su compromiso y la voluntad de desarrollar un estilo único que dejara a Ecuador en un lugar importante en las manifestaciones literarias del mundo. Gracias a ellos se estudia la historia y la sociedad desde diversas perspectivas.
4) Medardo Ángel Silva
1898 – 1919
Medardo Ángel Silva (Guayaquil, 1899-1919) fue un poeta ecuatoriano, precursor del Modernismo en ese país. Escribió desde adolescente y se convirtió en una de las voces poéticas más importantes. Su influencia más marcada fue la de los poetas simbolistas franceses Baudelaire y Verlaine, su gusto por lo foráneo marcaría su obra.
Su vida estuvo signada por el pesimismo, quizás por sufrir desprecios de una dura sociedad donde él era de raza mulata. Fue considerado el “poeta del dolor”, rasgo que lo llevó a usar con gran maestría las metáforas y en algunos de sus libros hacer verdaderas alabanzas de amor a la muerte. Sin dudas, fue el poeta más influyente de principios del s.XX.
Ese estilo en la pluma y su manera de vivir el dolor ha hecho determinar a los biógrafos que se suicidó por problemas amorosos. Junto con otros tres autores conformó la generación de “los decapitados”, pues todos sufrieron el triste destino del suicidio. Su hastío de vivir no solo se vio reflejado en su propia vida, sino también en su obra.
Entre sus obras más destacadas se encuentran:
- El árbol del bien y del mal
- Primeros poemas
5) Jorge Carrera Andrade
1903 – 1978
Jorge Carrera Andrade (Quito, 1903-1978) poeta ecuatoriano considerado el padre del postmodernismo y quien da entrada a la corriente realista y vanguardista. También ejerció la diplomacia con mucho éxito y trascendió las barreras nacionales, cosa que lograron muy pocos escritores en el siglo XX. Formó parte de la apertura cosmopolita en la literatura.
Su condición de diplomático lo ayudó a llevar la poesía ecuatoriana a otros ámbitos y de hacerla partícipe de los movimientos literarios del momento. En su obra hizo gala de un lenguaje experimental, cercana a corrientes como el surrealismo y el dadaísmo europeo. Aunque tuvo estas influencias, en realidad, no se adhiere completamente a ninguna.
Su obra tuvo varias etapas. En un principio hubo influencia de las vanguardias, su poesía tenía un carácter universal en lo geográfico y en lo estético. En los años 50 se aprecia su maduración poética, expresada en una macro percepción del mundo hacia lo micro, y desde la esencia del ser hacia las cosas. Toda su obra fue recogida en obras completas en 1976.
Entre sus obras más destacadas se encuentran:
- Microgramas
- Hombre Planetario
- El camino del sol
6) Juan Montalvo
1832 – 1889
Juan Montalvo (Ambato, 1832 – París. 1889) fue importante y destacado ensayista ecuatoriano, gran estudioso de los autores clásicos y partidario de respetar las reglas de la gramática para concretar obras de altura lingüística. Desde muy joven tuvo experiencias amargas con las dictaduras de su país, por lo que a largo de su vida se opuso a ellas.
Fue fundador de la revista El Cosmopolita, cuyas páginas, en gran parte, eran dedicadas a criticar al gobierno de García Moreno. Su ánimo de polemizar lo llevó al exilio en varias oportunidades, lo que lo llevó a vivir en Colombia por bastantes años y también en Europa, donde se codeó con escritores de alto nivel.
Su obra fue muy conocida y aunque en su mayoría era clasificada como ensayística, también exploró un poco en la novela, publicando solo una. Su espíritu de lucha lo llevó a tener grandes conquistas, pero también importantes pérdidas, como la de su matrimonio y con él sus hijos, de quienes prácticamente se desentendió.
Entre sus obras más destacadas se encuentran:
- Las Catilinarias
- Capítulos que se le olvidaron a Cervantes
- Siete tratados
6) Juan Montalvo
1832 – 1889
Juan Montalvo (Ambato, 1832 – París. 1889) fue importante y destacado ensayista ecuatoriano, gran estudioso de los autores clásicos y partidario de respetar las reglas de la gramática para concretar obras de altura lingüística. Desde muy joven tuvo experiencias amargas con las dictaduras de su país, por lo que a largo de su vida se opuso a ellas.
Fue fundador de la revista El Cosmopolita, cuyas páginas, en gran parte, eran dedicadas a criticar al gobierno de García Moreno. Su ánimo de polemizar lo llevó al exilio en varias oportunidades, lo que lo llevó a vivir en Colombia por bastantes años y también en Europa, donde se codeó con escritores de alto nivel.
Su obra fue muy conocida y aunque en su mayoría era clasificada como ensayística, también exploró un poco en la novela, publicando solo una. Su espíritu de lucha lo llevó a tener grandes conquistas, pero también importantes pérdidas, como la de su matrimonio y con él sus hijos, de quienes prácticamente se desentendió.
Entre sus obras más destacadas se encuentran:
- Las Catilinarias
- Capítulos que se le olvidaron a Cervantes
- Siete tratados
7) Jorge Icaza
1906 – 1978
Jorge Icaza (Quito, 1906 – 1978) fue un novelista ecuatoriano, uno de los más altos representantes de la corriente indigenista de Suramérica. Gracias a Icaza, el tema de los indígenas en Ecuador se visibilizó y comenzó un movimiento de escritores comprometidos con las causas sociales. Gran parte de su obra la produjo en Colombia.
Su obra narrativa reflejaba aspectos crudos de la realidad y una perspectiva crítica sobre la esclavitud de los indígenas en tierras ecuatorianas. El indigenismo fue un movimiento muy fuerte en Perú, Bolivia y Ecuador, del que Jorge Icaza participó a lo largo de su carrera. A tal punto que hoy por hoy es considerado el autor más leído en la historia de Ecuador.
Además de novelas, también se ocupó de dirigir obras teatrales en Colombia y actuó desde joven en Quito y Buenos Aires. En 1934, en esta ciudad ganó el Premio Revista América por una de sus novelas. Al año siguiente, en 1935, ganó el Premio Nacional de Literatura en su país natal. Fundó la Casa de la Cultura y fue director de la Biblioteca Nacional.
Entre sus obras más destacadas se encuentran:
- Huasipungo
- En las calles
- Cholos
8) Eliécer Cárdenas
1950 – 2021
Eliécer Cárdenas (Tambo Viejo, 1950 – Cuenca, 2021) fue un narrador, dramaturgo y periodista ecuatoriano. Desde muy pequeño tuvo gran entusiasmo por la lectura y en la adolescencia comenzó a escribir relatos de la corriente indigenista. Leía con frecuencia a “los decapitados” y obras del existencialismo.
Como escritor fue muy productivo, publicó en total 13 novelas, 6 cuentos y 1 obra teatral. Dos de sus novelas recibieron galardones importantes como el Premio Casa de la Cultura Ecuatoriana (1979) y el Premio del Diario “El Universo”. Eliécer Cárdenas también ocupó puestos importantes en el periodismo y la academia.
Fue miembro de la Academia Ecuatoriana de la Lengua, presidente de la Casa de la Cultura Ecuatoriana, jefe de redacción en el diario El Tiempo y director de la Biblioteca Municipal, en Cuenca. En su juventud fue un luchador social. Una de sus más fuertes batallas fue por el ingreso igualitario a las universidades.
Entre sus obras más destacadas se encuentran:
- Polvo y ceniza
- Háblanos Bolívar
- Una silla para Dios
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