Por el Camino de Swann
Autor: Marcel Proust
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A la sombra de las muchachas en flor
Marcel Proust
A la sombra de las muchachas en flor, galardonado con el Premio Goncourt en 1919, es el segundo volumen de la obra magna de Marcel Proust «En busca del tiempo perdido». Las reminiscencias del narrador discurren en esta novela entre la infancia y la adolescencia.
Tras volverse poco a poco indiferente a la hija de Swann, Gilberte, el narrador visita el balneario de Balbec con su abuela y conoce a Albertine, «una chica de brillantes y sonrientes ojos y mejillas redondeadas y opacas».
Pero en el pesimista universo proustiano esta afortunada connivencia resulta ser una concesión caprichosa e imprevisible, un don gratuito ante el cual la única actitud válida es la disponibilidad.
Sodoma y Gomorra
Marcel Proust
Sodoma y Gomorra es el cuarto volumen de la heptalogía «En busca del tiempo perdido», publicada en 1922. Se compone de cuatro capítulos. Continúa con la descripción de la vida social de las clases altas francesas del cambio de siglo XIX al XX.
Esta novela se centra en dos figuras clave: Palamèdes, barón de Charlus y hermano del príncipe de Guermantes, y en Albertine Simonet, su amante con la que posee una relación llena de paradojas para él.
El título se debe a las relaciones que mantiene el barón de Charlus. Primero con Jupien, un chalequetero y con Morel, un soldado que también es un experto violinista. Albertine aparece como un personaje que sobrevuela la novela pero que va tomando carácter a partir de la mitad del libro. El narrador se obsesiona con la sexualidad de ella, e intuye que las mujeres no le son ajenas.
La prisionera
Marcel Proust
El amor y las obsesiones de las que irremediablemente va acompañado son el eje vertebrador de La prisionera, el quinto volumen de «En busca del tiempo perdido», la colosal obra con la que Marcel Proust se erigió como uno de los mejores escritores de la historia de la literatura.
El narrador recluye a Albertine en su casa de París para alejarla de las tentaciones lésbicas, al tiempo que desarrolla su particular teoría sobre los celos, el placer sexual, los remordimientos y toda la gama de sentimientos encontrados que produce en el ser humano el amor.
Sus digresiones en torno al arte, como la famosa disquisición engendrada a partir de la muerte del escritor Bergotte y de un cuadro de Vermeer, Vista de Delft, se traducen en algunas de las páginas más hondas, emocionantes y turbadoras que sobre la pulsión creativa se hayan escrito jamás.
La fugitiva
Marcel Proust
Escrita como la sexta parte de «En busca del tiempo perdido», La fugitiva fue publicada en 1925 y tiene una unidad muy fuerte con la parte precedente, «La prisionera», de forma tal que la primera mencionada es una suerte de aceleración dramática, una conclusión de la segunda.
El relato central de La fugitiva es la muerte de Albertina. Al desarrollar el tema central nos expone a la consideración los sentimientos asociados a esa muerte: amor, celos, rabia, sufrimiento, dolor, tristeza, duda, separación, desgracia, desdicha.
Relata también el viaje que el Narrador emprende a Venecia y el matrimonio de Roberto de Saint-Loup —sobrino de los duques de Guermantes— con Gilberta, la hija de Carlos Swann y Odette de Crécy.
El mundo de Guermantes
Marcel Proust
La tercera parte de «En busca del tiempo perdido», El mundo de Guermantes, fue publicada por primera vez entre 1920 y 1921; el tema central es la introducción del Narrador en el barrio Saint-Germain de París y en los salones mundanos de la sociedad aristocrática parisina.
El mundo de Guermantes, que consta de dos partes, se inicia con la descripción de la mudanza de la familia del Narrador a un apartamento del hotel de Guermantes.
La segunda parte se divide en dos capítulos; en el primero ocurren varios episodios luctuosos: la enfermedad, el ocaso y la muerte de la abuela del Narrador y la enfermedad del escritor Bergotte, quien encarna al novelista típico; en el segundo capítulo, Proust nos presenta los temas del ingenio de los Guermantes y de los zapatos rojos de la duquesa.